El pasado viernes, cumpliendo el deber estatutario, nuestra Academia celebró su Asamblea General, en esta ocasión en Constantina, en el salón municipal de plenos cedido para la reunión por el Ayuntamiento de la localidad serrana.
El programa comenzó con visita a la finca La Purísima Concepción, dónde se ubican los viñedos de la Bodega Fuente Reina, acompañados por el propietario, Jaime García, comprobando el efecto beneficioso de las últimas lluvias. Bajo producción ecológica, en la finca se cultivan uvas merlot, tempranillo, cabernet-sauvignon y garnacha. En la comarca funcionaban hasta 250 lagares, cuando llegó la filoxera. Conocimos igualmente la Bodega, en el centro del pueblo, fundada en 1930 por Manuel López Redondo, que elaboró el primer tinto andaluz.
La Bodega Fuente Reina, produce el llamado “Vino de pago”, adscrito a la IGP Vinos de la tierra Sierra Norte de Sevilla. El efecto del cambio climático ha anticipado la fecha de la vendimia -la tercera semana de agosto-. Su marca es Fundus, con varios tipos de vino.
A continuación, ya en la Casa Consistorial, nos recibió el alcalde, Rubén Rivera Sánchez. En sus palabras de bienvenida, el regidor recordó que fueron los vinos sevillanos los primeros que viajaron al Nuevo Mundo con Magallanes. Y aludió igualmente a la celebración de la Feria del Mosto en Constantina, junto a la muestra de los productos ibéricos.
Comenzó la Asamblea de nuestra Academia, siguiendo el orden del día, repasando nuestro presidente la memoria de actividades realizadas durante 2024, destacando nuestras colaboraciones con la Universidad Pablo de Olavide, con los Grupos de Desarrollo Rural, con Turismo Sevilla etc., comenzando ahora en 2025 el ciclo dedicado al Año de los Vinos de Sevilla.
Junto al enunciado de las actividades previstas para el presente año, el presidente dio la bienvenida a los nuevos miembros de la Academia, algunos de los cuales asistieron al acto, y cuyas incorporaciones enriquecerán a nuestra entidad.
Finalizada la sesión de la Asamblea, con las votaciones correspondientes, nos dirigimos al lugar del almuerzo, la finca Los Pozos de Nieve, un edificio del siglo XVII-SVIII, que fue propiedad de la ciudad de Sevilla, fábrica de nieve y posterior matadero industrial, hasta 1960. Actualmente tiene la calificación BIC, y tras su excelente rehabilitación, está dedicado a eventos y alojamiento rural, ofreciendo a los visitantes un espacio lleno de historia y cultura.
El contenido de la jornada del pasado viernes, confirma la apuesta de la Academia por salir a la provincia, para conocer el patrimonio en su faceta histórica y gastronómica; y concretamente este año con la dedicación a los vinos de Sevilla, con los que hay pendiente un serio trabajo de divulgación.
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